Tras la Cabalgata de Reyes Magos del año 2002 que se caracterizó por un exagerado e innecesario derroche, desde Solano difundimos un comunicado de protesta (se puede leer más abajo) que fue repartido casa por casa, pues veíamos que una fiesta tan bonita y entrañable como la Cabalgata de Reyes Magos estaba derivando hacia un penoso acto (que es en lo que actualmente pensamos se ha convertido) consumista, despilfarrador, insolidario y poco educativo para niños y mayores.
Ahora, cuatro años después, nos vemos en la obligación y el compromiso social de volver a sacar el mismo comunicado, ya que desde entonces hasta ahora, no solo no se han corregidos las malas actuaciones que denunciabamos en su día, sino que cada año han ido en un alocado aumento.
¡RECORD!, UN KILO PARA CADA VISUEÑO/A
Desde hace tiempo venimos reflexionando sobre como mejorar la Cabalgata de los Reyes Magos en nuestra localidad. Por tanto, no nos gustaría que nuestras sugerencias o críticas constructivas se confundan con un ataque contra esta fiesta. Queremos que quede suficientemente claro que no estamos contra esta celebración, sino contra sus excesos, porque molestan a toda persona que tenga un poquito de sensibilidad social. Prueba de ello es la cantidad de comentarios críticos que los visueños (incluido el Alcalde) han realizado sobre la cabalgata de este año, debido al despilfarro de caramelos. Sin duda ha sido el principal motivo de conversación del día después. Mucha gente ha comentado que "esto no puede seguir así", "que se han pasado", "que es una lástima el dinero tirado en caramelos", "que es un despilfarro inadmisible", etc...
Al Colectivo Ecopacifista Solano no le parece educativo, ni justo, ni ético, que se tiren literalmente tantas toneladas de caramelos (aproximadamente un kilo por visueño/a) que casi nadie se molesta en coger y que para lo único que sirven es para ser pisoteados, creando molestias y problemas diversos: calles y aceras sucias que cuesta bastante trabajo y dinero limpiar, alto consumo de agua para la limpieza de las mismas, alcantarillas atoradas, aumento innecesario de nuestra tasa de residuos, zapatos pegajosamente sucios, etc...
ANTE ESTA SITUACIÓN:
A) Debemos ser conscientes que nuestra ostentación y derroche resulta indignante para las personas empobrecidas y por ello deberíamos hacer un esfuerzo de moderación.
B) Consideramos que estamos formando a nuestros hijos en el derroche, en el tirar por tirar en vez de administrar solidariamente lo que nos sobra. Mientras, millones de niños como ellos, carecen de los recursos más elementales para poder vivir.