AYUNTAMIENTO Y CONCIENCIA MEDIOAMBIENTAL
Conservar el medio ambiente, preservar la biodiversidad o tener un aire limpio es un signo inequívoco de desarrollo sostenible y de calidad de vida. A nivel planetario (global) tenemos unos desafíos tremendos para evitar un cambio climático catastrófico, una extinción masiva de especies o la proliferación de pandemias, pero a nivel local también tenemos nuestros retos en forma de deberes pendientes. Estamos jugando con fuego, ante crisis continuas y sistémicas, provocadas por la destrucción de los equilibrios naturales. Tenemos una gran disyuntiva “ecologismo o crisis”, no hay otra.
Quienes vivimos en El Viso del Alcor tenemos la suerte de vivir en un entorno precioso, con una peculiar orografía y con una gran riqueza ambiental, enmarcado en ese espacio singular que conforman la Vega, la Cornisa de Los Alcores y la zona de las huertas. Pero lamentablemente el capital natural heredado de nuestros antepasados lo estamos despilfarrando innecesariamente. Está sufriendo un deterioro creciente, debido a la contaminación en sus distintas formas: abuso de los fertilizantes químicos y de los pesticidas, filtraciones de purines, destrucción de la vegetación de ribera y de su biodiversidad, eliminación de huertas, escombreras, vertidos, canteras, abuso del coche, urbanismo disperso, quema de residuos, chimeneas incontroladas, etc.
En nuestra localidad hay una escasa conciencia de la importancia del medio ambiente y de la crisis ecológica y civilizatoria que nos espera, en pocos años, si no modificamos drásticamente la sucia forma de producir y nuestro estilo de vida. Estamos a años luz del desarrollo sostenible. No somos conscientes de nuestra huella ecológica, del impacto que generamos en la Naturaleza. Consumimos por encima de las posibilidades ecológicas, sin sentido del límite.
Tenemos que responder a lo global también desde lo local, para que no nos ocurra aquello de “unos por otros y la casa sin barrer”. Y para ello es clave un ayuntamiento consciente, que no se inhiba, que entienda que el medio ambiente es mucho más que recoger la basura o mantener los jardines. Un ayuntamiento que tenga un comportamiento proactivo y ejemplar en el ahorro energético y de agua, en la promoción de un consumo sostenible, en una dieta menos cárnica, en la conservación de los hábitas, en la reducción de las basuras, en la elaboración de compostaje, en la promoción de la agroecología, en la eliminación de los malos humos, en la persecución de los vertidos y del glifosato, en la arquitectura bioclimática, en la erradicación de los malos olores, etc. Pero para ello es imprescindible que tenga un plan de actuación, una hoja de ruta de la que carece, porque nunca se ha considerado su necesidad. Fruto de ello es la pasividad que siempre han mostrado los gobiernos municipales ante las agresiones que sufre el medio ambiente visueño y alcoreño. Hay muchas prácticas contaminantes que se han realizado -y se realizan- con todo el descaro, incumpliendo la ley, porque se ha extendido la cultura de la impunidad ante la falta de sensibilidad municipal. ¡Tomen nota por el bien de tod@s!